La industria automotriz vive un vía crucis por falta de divisas. La presidenta de Canidra, Frisne Piñate asegura que el problema es el retardo de la liquidación de dólares, pues los bancos demoran hasta ocho meses en entregarlos
Los conductores de vehículos ruegan a Dios que no se dañe el carro, pues los repuestos no se obtienen con facilidad y algunos talleres le dicen al usuario que no se consigue la pieza para su vehículo, con lo cual éste debe buscarla por su cuenta y esperar que el seguro le pague contra reembolso. El otro inconveniente es tener el carro estacionado en el garaje de su casa por meses esperando por la autoparte.
El problema más grande que tiene el país es la escasez de divisas. Los bancos demoran hasta ocho meses en entregar el cupo para acceder al Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera (Sitme) y por esta razón es difícil obtener los productos a tiempo.
Cada año empeora la situación de escasez de piezas para vehículos y cada día se cierran más las puertas para obtener divisas para la reposición de autopartes. "El otro inconveniente es que ahora los puertos están colapsados y esto retarda el proceso para que el repuesto llegue a los puntos de venta", expresó Frisne Piñate, presidenta de la Cámara Nacional de Comercio de Autopartes (Canidra).
Agregó: "la fábrica en el extranjero empieza a hacer el producto cuando recibe la orden. Actualmente los proveedores por el retraso del pago del dinero han perdido la confianza en la industria automotor venezolana, y por esta razón ahora solicitan el pago de contado cuando en años anteriores se podía pagar a crédito, esto es consecuencia del retardo en el suministro de dólares", dijo.
De igual forma, Omar Bautista, presidente ejecutivo de la Cámara de Fabricantes de Venezuela de Productos Automotores (Favenpa), dijo que: "en julio se tuvo cero liquidaciones de divisas, por lo que la deuda con los proveedores extranjeros volvió a subir después de haber bajado en junio". Asimismo, afirmó que lo adeudado a los proveedores internacionales sobrepasan los 100 millones de dólares.
LA OFERTA DEBERÍA PREVALECER
Para la presidenta de Canidra cada día aumenta el desabastecimiento del parque automotor y por ende se incrementa la inflación; las personas que traen las piezas por su cuenta especulan sobre el precio del repuesto.
Lo que debería ocurrir es la libre oferta y demanda para evitar este mal, con un mercado que ofrezca igualdad de condiciones y existencia de los productos a fin de evitar el abultamiento de precios. Según Piñate "lo más triste, es que en la actualidad se piden las piezas y partes donde sea, hasta algunos se ven en la necesidad de utilizar el cupo electrónico de Cadivi para solicitar el repuesto a otros países".
A su juicio, la mayoría de los accidentes de tránsito además de las imprudencias del conductor, son consecuencia del desgaste y de partes dañadas. También el deterioro de las piezas de un vehículo se produce por el mal estado en el que se encuentran las arterias viales del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario